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“Si no te gusta algo, cámbialo. Si no puedes cambiarlo, cambia tu actitud”. Le cojo prestada la frase a Maya Angelou para hablaros del cabello rizado. Esta es la historia de Rocío Escalante, pero podría ser la historia de un montón de chicas que nacieron con el pelo rizado. Después de años de lucha con mis rizos, de planchas y tratamientos alisadores, decidí aceptar la naturaleza de mi cabello y aprender a cuidarlo para sacarle el máximo partido.
El cabello rizado no es fácil, pero puede ser maravilloso si te haces con él. El encrespamiento y la deshidratación son sus principales problemas. Para hacerles frente, esta es mi guía de cuidados.
Para lavarlo utilizo dos tipos de champú. Uno que me ayuda a limpiar bien el cuero cabelludo. Aunque los cabellos rizados suelen ser secos y no producen grasa, el uso de productos de peinado hace que se depositen residuos. Y estos residuos necesitan sulfatos para que el cuero cabelludo quede limpio. Y en la segunda jabonada utilizo un champú para definir el rizo y proteger el color, por lo general, son champús muy hidratantes.
Atención a un error que se suele cometer de forma habitual, y que afecta a todos los tipos de cabellos, lisos y rizados: no hay que frotar toda la melena. Hay que lavar el cuero cabelludo, pero el resto no necesita ser manipulado en exceso, ya que lo que se consigue es abrir la fibra y estropearla.
En los cabellos extremadamente secos o rizados, usar acondicionador no sirve porque estos productos solo ayudan a desenredar, pero no aportan la nutrición que necesitan. Yo uso siempre mascarilla, dejándola actuar mínimo 5 minutos y trabándola con los dedos para que penetre bien. Aprovecho ese momento también para peinarlo con un peine de púas anchas. Jamás peino el cabello rizado en seco.
Otro producto recomendable para cabellos rizados es el aceite. Lo utilizo 1 o 2 horas antes del lavado. Así consigo que el pelo esté más suave y nutrido. Además, de vez en cuando, aplico una mascarilla de noche que actúa mientras duermo y que no necesita aclarado.
El cabello mojado es más frágil, así que yo siempre lo seco, con un secador que controle la temperatura, con difusor y por partes, es decir, doy calor, espero, vuelvo a dar calor y hago otra cosa, para que así el rizo pueda coger forma de manera natura. Para finalizar cambio difusor por boquilla y pongo aire frío en la raíz para dar volumen.
Importante, antes de salir de la ducha, aplica una crema de peinado sin aclarado. Y después, crema fijadora en la raíz.
Aplico agua, un activador de rizos y una crema de peinado sin aclarado para hidrata. Lo aplico todo con las manos. No meto el peine ni el cepillo nunca con la melena seca.
Estos son algunos de los productos que suelo utilizar para cuidar mis rizos, espero que os gusten y os puedan ayudar a domar vuestra melena.
Champú Lumicia de René Furterer
Champú Sublime Curl de René Furterer
Aceite multiusos Karinga de René Furterer
Aceite nutritivo Karité de René Furterer
Crema de Belleza Absolue Kératine de René Furterer
Tratamiento activador de rizos Sublime Curl de René Furterer
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